Atado de pies y manos y con 32 balazos en su cuerpo fue encontrado muerto ayer el subcomisionado de la Policía, Marco Tulio Reyes, de 42 años, quien era originario de esta ciudad.
El cuerpo estaba tirado a un lado de su carro tipo camioneta color gris Isuzu Rodeo en la carretera que conduce al sector de Finca 3.
En la escena encontraron casquillos de bala nueve milímetros y un machete que supuestamente utilizaron sus asesinos.
Hasta ayer se desconocía el móvil de su muerte que enluta a la Policía. La víctima era el director de la Escuela de Suboficiales en Tegucigalpa.
El hallazgo
A las 7.30 de la mañana fue encontrado el cadáver del infortunado oficial. Estaba desnudo, atado de pies y manos, con heridas de arma blanca y 32 orificios de armas de fuego.
De inmediato las personas que circulaban por la zona dieron el aviso a las autoridades, quienes llegaron al lugar una hora después.
En el lugar no hallaron las armas de reglamento que debía portar el oficial ni documentación.
Por la dinámica de la escena del crimen las autoridades suponen que los delincuentes llevaron hasta el lugar a la víctima.
"No tenemos mayores detalles de lo que ocurrió. Por la forma en que se encontró su cuerpo y el vehículo nos da una idea de cómo fueron las circunstancias en que se dio el crimen. Esperamos que las investigaciones nos den pistas concretas para capturar a los asesinos y conocer el motivo", manifestó el subcomisario Nazir López, vocero de la Policía.
Un acto cobarde
A las 9.30 de la mañana, a bordo del helicóptero Halcón 2, llegó a la escena el viceministro de Seguridad, Mario Eduardo Perdomo.
Con su rostro acongojado, el funcionario mostró su tristeza por la pérdida del oficial.
"Estamos conmovidos. Es un hecho lamentable. La Policía Nacional se viste de luto, esperamos esclarecer rápidamente este hecho. No nos atrevemos a dar una información de algo tan reciente para saber qué pasó. Ojalá que quienes cometieron este hecho paguen", dijo Perdomo.
Indicó que era un excelente oficial que se había ganado el cariño de la ciudadanía
"No vamos a descansar, es un compañero nuestro. Fue una forma cobarde de matar a un compañero y vamos a actuar", apuntó.
Al lugar de los hechos llegaron varios de sus compañeros de promoción que no podían creer que el oficial estuviera muerto y lamentaron la forma cómo lo asesinaron. Varios de sus hermanos llegaron hasta la escena. Su tristeza era evidente.
Iba a ver a su madre
Su hermano mayor en un corto diálogo con LA PRENSA manifestó que Marco Tulio había llegado a El Progreso ayer para pasar con su madre y sus hermanos las fiestas de Navidad.
"Ayer llegó a El Progreso. No sabemos qué ocurrió. Hoy teníamos planeado reunirnos en familia. Su esposa está en Olanchito, es duro darle esta noticia", dijo el hermano del victimado, quien no dio su nombre.
Se le consultó si el oficial tenía enemigos, pero su hermano dijo que no.
"Era una persona buena, actuaba conforme a ley, no tenía enemigos. Es un dolor grande. Sólo pedimos a Dios fortaleza, sobre todo para mi madre que no soportará esta pérdida", apuntó el familiar.
El cuerpo del oficial fue llevado a Medicina Forense en San Pedro Sula para practicarle la autopsia correspondiente.
Ayer mismo se entregó el cuerpo a sus familiares, quienes lo trasladaron hasta El Progreso donde es velado y se le dará sepultura este día.
El subcomisionado de policía Marco Tulio Reyes Chávez fue subdirector nacional de la Policía de Tránsito y jefe regional de la Policía de Investigación en San Pedro Sula.