Sin siquiera sobrevivir el año, Sven-Goran Eriksson fue despedido ayer de su cargo como técnico de la Selección mexicana de fútbol y se convirtió en otra víctima del estadio Olímpico de San Pedro Sula.
La derrota del miércoles 3-1 en Honduras por las eliminatorias mundialistas fue el puntillazo final a la gestión del sueco, que reemplazó al cesado Hugo Sánchez en junio del año pasado.
México ocupa el cuarto lugar en el hexagonal final de las eliminatorias mundialistas, con un triunfo y dos derrotas en tres partidos. De mantener esa posición, tendría que disputar un repechaje contra el quinto de Sudamérica para viajar a Sudáfrica 2010. "Le comunicamos al señor Eriksson que su ciclo con el equipo nacional terminaba", dijo ayer en rueda de prensa el presidente de la Federación Mexicana de Fútbol, Justino Compeán.
Javier "El Vasco" Aguirre, ex del Osasuna y Atlético de Madrid, tomará las riendas del "Tri", que reanuda la campaña eliminatoria el 6 de junio en El Salvador. Aguirre, quien hasta poco dirigió al Atlético de Madrid, ya fue timonel de la Selección en las eliminatorias y el Mundial de Corea-Japón 2002.
Al "Vasco" le toca reemplazar nuevamente a un técnico despedido tras un mal comienzo en la fase final de las eliminatorias de la Concacaf.
Sustituyó a Enrique Meza en 2001 (luego de perder 3-1 ante Honduras) para clasificar al "Tri" al Mundial del año siguiente en Corea-Japón. La era de Eriksson comenzó a tambor batiente bajo el cobijo de ser local y México, con algunos apuros, logró ganar sus tres primeros encuentros de la fase de grupos de las eliminatorias. Pero luego cayó en Jamaica, empató en Canadá y cayó ante Honduras para avanzar al hexagonal final con la diferencia de goles como su boleto. En la hexagonal final, Eriksson perdió de visita con Estados Unidos y nuevamente contra Honduras para acabar de agotar la paciencia de los dirigentes mexicanos. Eriksson ganó cuatro juegos, todos como local, perdió cuatro y empató uno por las eliminatorias.
Ericksson: "No es justo"
El técnico despedido se lamentó al conocer la decisión de la Federación Mexicana.
"Justo o no justo, es algo que no importa, personalmente digo que no es justo porque pensé que quería dirigir a México en el Mundial", señaló Eriksson. "Eso cuenta poco porque la vida del fútbol es esto, el presidente o la federación no pueden cambiar a todos los jugadores, pueden cambiar director técnico".
De acuerdo con varios informes de prensa, Eriksson fichó con México por una cifra que rondaba los nueve millones de dólares. El sueco dijo que no tenía idea de cuánto dinero recibiría por su paso de nueve meses en México.
"No tengo idea porque nunca vi el contrato... existe uno, pero tengo otras personas que tratan esto, ellos ven las cosas legales y de dinero, por eso tengo otra persona para mi empresa, no tengo idea cómo está (el contrato)", concluyó Eriksson.


"No es el técnico el culpable, son los monos que no ponen empeño en jugar. Así tengan el mejor técnico del mundo, pero si no le ponen ganas nunca ganarán".
Montalvo,
Denver.

"Ahora falta que se vayan Justino Compeán, Decio de María y Jorge Vergara. Es decir, la bola de ineptos que han hecho un desastre con nuestras selecciones de fútbol".
Georgius
Guadalajara.

"¿Y los jugadores qué? También se les debe tocar. Los que no jugaron bien fueron ellos, los que no dieron el ancho en la cancha fueron ellos. Eriksson se ha equivocado en cómo ha puesto a los jugadores".
Dalbert, DF.